No hay duda de que el esquí es un gran ejercicio físico que trabaja con mayor intensidad el tren inferior y que además tiene un componente aeróbico bastante beneficioso. La otra cara de la moneda es que las articulaciones como la rodilla sufren con el esquí de alta intensidad al hacer de «amortiguadores» de nuestro cuerpo, y también las lesiones derivadas de las caídas. Lo interesante sería poder mantenernos en forma todo el año con el esquí, pero como estaréis pensando, el problema es que por estas latitudes sólo hay nieve en invierno. Una pista cubierta como Xanadú no sirve de mucho, practicar el esquí con regularidad sale por una pasta, y temo que la pendiente es demasiado liviana como para hacer ejercicio con cierta intensidad. También os he propuesto los patines en línea o alternativas más análogas al esquí como el Road Ski, pero tiene los problemas del castigo a las articulaciones y el riesgo de los golpes.
Si pasas de la emoción del riesgo y no quieres arriesgar tu integridad, o quieres volver a esquiar después de una larga lesión, puedes usar el Pro Fitter, el cacharro de la foto, un aparato bastante interesante para ejercitarse, pero con un precio bastante elevado, al cambio unos 378 euros. Seguro que siempre será más barato que el Whizzard de Trawers (para mí la mejor emulación del esquí), pero no tan divertido!
[youtube]pvVckyx5ugQ[/youtube]
